ESCUELA MUNICIPAL
SANTANDER 3 Calasanz A 2
Sábado 2 Noviembre, 16h 30'.
Campo del Regimiento.
Alineación: Ángel (Dani); Miguel (Javi Pérez),
José Villanueva, Mario (David Castro), Mikel (Jaime); Gabi, Javi Villota, Rubén;
Edu, Ismael y Dani (Diego).
Los goles:
1-0 (13’): Dani aprovecha en el segundo palo un buen servicio de Edu
desde la banda derecha.
2-0 (15’): Dani de nuevo, en una jugada muy parecida a la del primer
tanto, esta vez a centro de Gabi.
2-1 (35’): Contraataque del Calasanz que
aprovecha, en evidente fuera de juega, el nº 7 de los colegiales para superar
la salida de Ángel.
2-2 (40’): Precioso gol de falta por la
escuadra del nº 7.
3-2 (65’): Ismael recibe un pase en profundidad de Javi Villota que
aprovecha para irse en velocidad de sus marcadores y cruzar de disparo fuerte
ante la salida del portero.
EL RESUMEN
Sufrido triunfo del Infantil B de la
Escuela frente a uno de los rivales con los que tendrá que pelear por la
salvación. En cualquier caso, la victoria cobra especial valor por la forma en
la que se consiguió y porque supone la primera como local y la segunda
consecutiva, un buen punto de arranque todo ello para la consolidación en la
categoría.
El partido comenzó con el habitual
tanteo entre los dos equipos, con bastante juego embarullado en el centro del
campo y poca claridad de ideas. Ambos equipos optaron por trabajar mucho en
tareas defensivas y, desde esa solidez en la parte de atrás, lanzar a los
puntas balones en largo (en algunas ocasiones, simples balonazos) para que los
delanteros crearan peligro. Quién antes se aprovechó de esta táctica fue la
Escuela que, en dos minutos mágicos y con una parecida factura en ambas
jugadas, se adelantó en el marcador con el doblete de Dani. La lástima fue que,
con ventaja clara, los chavales de la Escuela entraron en una de esas habituales
fases de despiste que les acompaña en este inicio de temporada, lo que permitió
a los colegiales rehacerse y buscar, con más ímpetu que fortuna, la portería de
Ángel. Un par de llegadas por banda y una ocasión clara en un mano a mano que
desbarató Ángel (sorprendentemente, el árbitro pitó saque de puerta en la
jugada) precedieron al gol visitante en la última jugada de la primera parte,
obtenido en claro fuera de juego que el colegiado no acertó a apreciar.
Ya con mínima ventaja en el
marcador, la salida de la segunda parte de la Escuela no hacía presagiar nada
bueno. Constantes pérdidas de balón en el centro del campo y cierta inseguridad
defensiva permitían al Calasanz rondar el área de Ángel con cierto peligro. No
tardó mucho en concretarse ese peligro con el gol del empate en una ejecución
perfecta del nº 7 calasancio, sin duda el mejor jugador de su equipo. Partido
nuevo que se presentaba con mejores perspectivas para los franjiverdes, más
despiertos y activos que una Escuela que parecía no había salido todavía del
vestuario. No obstante, el empuje visitante fue decayendo, al tiempo que el
carrusel de cambios habitual de las segundas partes le fue quitando ritmo al
partido. Con más peligro en las llegadas del Calasanz pero anotando también
alguna jugada de peligro por parte local, se llegaba a los últimos minutos en
los que parecía reinar cierto conformismo en ambos conjuntos con el empate.
Y en ese tramo final se produjo la jugada definitiva. Por fin, el centro
del campo de la Escuela fue capaz de hilvanar una buena combinación que hizo
llegar el balón a Javi Villota para que éste le colocara un preciso balón en
profundidad a Ismael que éste aprovechó para adentrarse en el área y superar
con un disparo duro y colocado al portero visitante. Era el 3-2 que premiaba,
quizás en exceso, a los locales pero que les supone un respiro enorme en la
lucha que tienen planteada por alejarse de los puestos de peligro. Quizás en el
futuro tengamos que dar su verdadero valor a esta victoria.
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